En un inesperado giro, el influencer Adrian Garza, conocido como Mr. Hillman, propietario de la famosa tienda de lentes de sol Hillman Eyewear, compartió una historia de engaño y traición que ha conmocionado las redes sociales. El joven empresario de Monterrey expuso públicamente las supuestas infidelidades de su prometida, la también influencer Melissa Mejía, desatando una tormenta de comentarios y especulaciones.
Adrian Garza utilizó sus historias de Instagram para narrar la dolorosa experiencia de descubrir que fue engañado durante meses por Melissa Mejía. El dueño de Hillman Eyewear admitió haber perdido su identidad en la relación, describiéndose a sí mismo como un «perrito necesitado de amor».
En una revelación impactante, Mr. Hillman presentó pruebas en forma de capturas de pantalla, videos y mensajes que, según él, demostraban la infidelidad de Melissa. La situación alcanzó un nivel aún más sorprendente cuando Garza afirmó que la influencer lo engañó al decirle que el hijo que esperaba era suyo, cuando en realidad pertenecía a otra persona.
«Me cuesta tanto asimilar todo esto, que literalmente viví en un engaño», compartió Adrian Garza en sus historias de Instagram, expresando su confusión y desilusión. Reveló detalles sobre el comportamiento sospechoso de Melissa durante el tiempo que estuvieron juntos.
El empresario afirmó que Melissa Mejía se embarazó de otra persona y le hizo creer que el hijo era suyo. Esta impactante revelación dejó a Mr. Hillman conmocionado y decepcionado, describiendo a Melissa como un «monstruo» y lamentando no conocer verdaderamente a la persona con la que estaba comprometido.
«Qué cinismo… siento que jamás tuve la menor idea con la persona que estaba, dormía, con la que estaba dispuesto a todo; estaba dispuesto a tener un bebé», expresó Adrian Garza, reflejando la incredulidad y la sorpresa que experimentó al descubrir la verdad.
Aunque Garza no detalló cómo descubrió la infidelidad, compartió capturas de pantalla que mostraban conversaciones de Melissa con su presunto amante, identificado como «Chelo». Estas conversaciones incluían detalles de sus encuentros y fotografías que evidenciaban la relación clandestina.